¿De qué sirve tener un negocio "exitoso" si no eres feliz?

 Tal vez al leer esto pienses que nos hemos vuelto locas y te preguntes:

“¿Cómo podría no ser feliz si mi negocio está prosperando?”

Pero, querida Lobita, te invito a mirar más allá de lo visible.

Tu negocio es un reflejo de tu ser interior

Puedes tener una marca brillante, con ventas que no paran de crecer, pero si como líder de ese proyecto no estás en armonía con lo que haces, si no te sientes satisfecha o conectada, esa marca es frágil, como la cáscara de un huevo... Y en cualquier momento, puede romperse.

Lo más doloroso es que cuando llegue ese momento te preguntarás: “¿Qué pasó? Si todo iba tan bien...”

¿Aún no lo ves? Si tu negocio no está alineado con el Dharma, ese propósito profundo y único que habita en ti, todo lo que construyas será superficial. El verdadero éxito es un reflejo de tu esencia, no al revés.

Emprender transforma, pero tu esencia permanece

Cuando te lanzas al mundo del emprendimiento, no es solo tu vida profesional la que cambia. Es una transformación completa que afecta quién eres y cómo te ves. Comienzas a sentir y experimentar la vida de otra manera. Pero hay algo que no cambia, y es tu esencia. Ese fuego interno que te impulsa, tu chispa única.

Nadie más puede hacer lo que tú haces de la manera en que lo haces. Por más que otras personas compartan tu pasión, la forma en que tú expresas tu misión es única. Tu negocio, entonces, es el reflejo más puro de esa magia que vive dentro de ti.

Comparar tu "éxito" con el de otros no te traerá felicidad

Es momento de soltar esa creencia agotadora de que tienes que estar siempre "hustling" o trabajando sin parar para ser "exitosa."

El éxito, Lobita, no es una fórmula única. Lo que significa para mí, no es lo mismo para ti. Pero el error más grande que cometemos es no detenernos a definir cómo es ese éxito para cada una de nosotras. ¿Cómo se siente? ¿Qué personas lo acompañan? ¿Qué emociones y acciones están presentes?

Es hora de parar, reflexionar, descansar y escuchar esa voz interna que sabe exactamente lo que realmente deseas. No quieres ser una de esas historias de emprendedoras que lo tienen todo, menos la felicidad. Tú mereces un río de sabiduría interna que fluya y te lleve hacia acciones alineadas con tu propósito universal.

Pero, ¿y el dinero?

El dinero, Lobita, es solo energía. Es una herramienta que te puede ayudar a acercarte a la felicidad, pero no es el objetivo final. Cuando te enfocas en transformar la vida de los demás, compartiendo tu sabiduría, tu camino y tu autenticidad, te conviertes en una guía, en una luz que otros buscan.

Y entonces, cientos o miles de personas querrán acercarse a esa medicina única que tienes para ofrecer… y estarán dispuestas a pagarte por ello.

Descansa, reflexiona y redefine el "éxito"

Te proponemos algo diferente: un concepto donde el descanso, la introspección y la recuperación sean pilares de tu éxito. Haz espacio cada semana para reconectar contigo, para redescubrir qué significa el éxito para ti, y para enamorarte de nuevo de tu negocio.

Cuando lo hagas, querida Lobita, verás que puedes tenerlo todo: prosperidad, impacto y, lo más importante, felicidad.

Con amor

Pauly y Joi